La vida en el vacío cuántico (Cuento)

quantum-void-ii

Escultura Quantum Void II 2008 de Antony Gormley (Photo Stephen White)

Dicen que estoy aquí, pero también que estoy allí, a miles de años luz de distancia de aquí. Me estoy moviendo a gran velocidad, pero sólo yo puedo determinarla. A esta velocidad, mi vida transcurre muy despacio. O al menos eso dicen… ¿Quién tiene razón?

El caso es que no sé cómo, ni por qué nací. Aquellos que se empeñan en darme a conocer dicen que sólo soy una fluctuación, que mi vida será efímera. Un tal Heisenberg llegó a esa conclusión. Si en lugar de justificar una alergia hubiera admitido que se había peleado, ahora ¡no estaríamos hablando de mí!

Por alguna razón, mi campo, mi hogar recibió prestada una cantidad de energía y aquí estoy. El problema es que, como todo lo que se presta, al cabo de un tiempo el préstamo se tiene que devolver. Ese no debería ser mi problema, yo no pedí el préstamo. Pero no, entre Heisenberg y mi campo se han puesto de acuerdo para amargarme la vida y lo tengo que pagar yo. Me obligan a vivir un tiempo imperceptible para poder devolver el préstamo.

Lo que ellos no saben, ya que nunca serán capaces de saber dónde estoy exactamente para poder preguntarme, es lo que seré capaz de hacer en ese corto tiempo. Conoceré a mi alma gemela. Tan iguales pero a la vez tan distintas. Seremos como los polos opuestos que se atraen, como dos cargas opuestas que cada vez se atraen más. Juntas viajaremos hasta donde seamos capaces de llegar a nuestra gran velocidad.

También conoceremos a otras parejas, e incluso tríos, de todos los colores y sabores, todas ellas unidas tan fuertemente, que prácticamente no nos dejarán formar parte de su relación, simplemente revolotearemos a su alrededor.

Pero un día llegará el momento, tendré que devolver toda la energía que mi campo tomó prestada. Y lo peor de todo, mi alma gemela también. Por última vez nos miraremos, nos acercaremos la una a la otra y nuestras similitudes dejarán de tener importancia. Sólo lo que nos diferencia cobrará valor. En el último instante la pasión estallará y volveremos a ser lo que fuimos antes de nacer: energía. La energía que nuestros respectivos campos debían. La energía que hace que todo, lo que por un momento estaba lleno, vuelva a estar vacío.

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s